La Wikipedia explica que no debe confundirse la intolerancia a los alimentos –una reacción adversa provocada por el consumo de cierta comida– con la alergia a los mismos, que provoca una respuesta del sistema inmunitario. Tratemos de entender mejor estos conceptos.
Experimentar reacciones físicas desagradables después de ingerir ciertos alimentos es algo bastante común, pero lo que el común de la gente ignora, cuando se encuentra con un caso de estos, o cuando se ve a sí misma afectada por este tipo de problema, es cómo describirlo: ¿alergia o intolerancia?
Y es que muchas personas –que hablan habitualmente de ambos conceptos– no sabría explicar sin embargo cuál es la diferencia entre alergia e intolerancia, cuando de alimentos se trata. El portal Vitónica y la revista Mía también explica la diferencia entre ambas.
Alergia a ciertos alimentos
Cuando la reacción a la ingesta de una determinada comida es causada por el sistema inmune del cuerpo estamos hablando propiamente de alergia. Nuestro sistema responde generando malestar, y en algunos casos síntomas más severos, que pueden pasar por picazón en la piel, problemas en los intestinos, vómitos, dolores, diarrea, hasta tos y problemas respiratorios.
En el más severo de los casos puede ocurrir una anafilaxis, que sí que podría poner en peligro la vida de la persona afectada, en caso de no recibir atención médica inmediata.
Existe un tipo de alergia que, a pesar de ser causada por el sistema inmunológico, no es resultado de la reacción de un anticuerpo en particular (como es el caso del anticuerpo IgE). Esta suele presentarse con mayor frecuencia en los niños.
Los alimentos que provocan con mayor frecuencia reacciones de alergia en las personas son: los lácteos, los cacahuetes, el pescado, las ostras y el trigo.
Intolerancia alimenticia
Por otra parte, la intolerancia de algunas comidas puede no resultar muy clara desde un principio, por lo tanto,un diagnóstico podría llevarse algo de tiempo.
Aunque una intolerancia no suele ser un peligro para la vida, sí puede provocar que la persona se sienta muy mal y los síntomas también podrían afectar el estado psicológico del individuo cuando el mismo siente que no hay ninguna mejoría.
Lo único que se sabe en torno a esto es que la reacción de intolerancia no es provocada por ningún anticuerpo del sistema inmunológico, sin embargo, la razón por la que ocurre es incierta.
Algunos factores vinculados al desarrollo de una intolerancia a alimentos son: estilo de vida, consumo excesivo de alimentos refinados, abuso de la comida rápida, dieta baja en fibra, dieta muy alta en grasa…
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